Dos de nuestros antihéroes se encuentran en uno de los tantos bares de Narribe cuando el wizard llega con rostro alarmante.- He escuchado a la matrona de casa hablando con una yochl, la destrucción de esta ciudad es un hecho, debemos escapar!. Es así como empieza el viaje del party, saliendo de lo único parecido a un hogar con unas cuantas herramientas y todas las esperanzas puestas en dar con aquella promesa llamada Menzoberranzan. El camino no es fácil, pronto empiezan a sentir el agobio propio de esas profundidades, la falta de oxígeno, la sensación de dar vueltas en círculo y pasar una y otra vez por el mismo túnel, como si ese conjunto de pasadizos tuviesen vida y les jugase una mala pasada.
Muchos dados bochados, innumerables chequeos de percepción y endurance, tanto esfuerzo para tener que negociar la vida con un pequeño dragón negro llamado Black Dead, y a qué precio...??!!
Tras encontrar al fin la entrada a uno de los túneles de acceso a la ciudad a través de un lago subterráneo y perder al kobold que les hacía de guía, el grupo de drows tiene ante sus ojos a la fortaleza drow insigne, Menzoberranzan.
CONSEJO: NO SE DEBE MATAR AL NPC DE LA DUNGEON MASTER!!!
Prior O'Brien (D.M)
RECORRIDO DEL PARTY. La consecuencia de las pifias en los chequeos de percepción y dungeonering.
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